Un día mirando por internet Sergio y yo encontramos un club
donde los jueves era “Las Noches Crossdresser” donde parejas, chicos solos y
otras Cd acudían cada noche a divertirse, tomar unas copas o escuchando algo de
buena música. Aunque también había zonas privadas donde poder seguir con la
diversión más en la intimidad.
Cuando llego el siguiente jueves comenzó mi preparación. Tuve
un día bastante normal, limpieza, recogida del hogar y poco más. Quería
reservarme para la noche y estrenarme en eso de las fiestas Cross, por la tarde
me tome mi tiempo para ponerme mona. Ducha, depilación, manicura, peinado y
maquillaje. Esteve mucho tiempo frente al espejo, hasta que conseguí parecer
una autentica hembra.
Al rato de estar casi preparada llego Sergio, mientras él se
duchaba yo aproveche para vestirme para la ocasión. Me puse un conjunto de
sujetador con tanguita blanco y rosa, vestido de fiesta corto y ajustado (era
una talla menos) amarillo y unas sandalias de tacón alto azules. Prepare un
bolso de fiesta azul a juego con los tacones y en el metí maquillaje, un par de
condones, papel y lubricante.
Ya estaba lista y Sergio también, el se había puesto
pantalón vaquero ajustado, camisa negra y zapatos sport. Juntos salimos del
portal y fuimos al coche, durante el trayecto mis nervios iban creciendo,
estaba algo asustada pero con muchas ganas de llegar al club. Por fin llego el
momento, el sitio estaba un poco retirado a las afueras de la ciudad, tenía un
poco el aspecto de un club de carretera. Grande, con dos plantas y un parking
para los clientes.
La entrada era normal, en ella había dos porteros fuertes y
grandotes, no pude evitar echarles un vistazo cuando Sergio pago la entrada.
Los chicos tenían que pagar entrada, costaba 10 euros más consumición. Las
chicas Cd entrabamos gratis y teníamos derecho a una consumición.
Por dentro el local era una pasada. Tenía dos barras para
tomar copas, en una de ellas había un escenario y en la otra una pista de
baile. En el centro del local había tres barras americanas elevadas situadas en
triangulo y taburetes a su alrededor. Por el resto de la sala había sofás y
mesas, unas más grandes que otras para estar en pareja o en grupos.
La iluminación del local era oscura, con mucha luz de neón y
de colores. Eran las 10 de la noche y la gente poco a poco iba llegando al
club. Sergio y yo nos tomamos la primera copa en la barra des escenario,
tranquilamente, observando el comportamiento de la gente. En los sofás había
varios grupos de amigas Cd, también estaban el típico par de amigos con ganas
de pasarlo bien, hombres solos y muchas parejas como la nuestra.
Tras un rato en la barra y otra copa decidimos ir a la pista
a echarnos unos bailes. En ella y tras unas miradas conocimos a una pareja, él
le dijo algo al oído a Sergio y nos marchamos a la barra a tomarnos una copa
con la pareja. Nos presentamos ellos eran Marcos y Sofía, tenían más o menos
nuestra misma edad pero no eran pareja solamente amigos que de vez en cuando
quedaban para ir juntos al club.
Nos contaron que se notaba que éramos nuevos en el club, que
se ve quienes entran por primera vez a un lugar como este. Sergio se puso a
hablar con Marcos y yo hice lo propio con Sofía. Ella era una chica Cd que
compartía piso, tenia suerte de que su compañero viajaba mucho, así que por lo
menos 10 0 12 días al mes era como si viviera sola en casa. También me conto
que Marcos era su follaamigo, que como tenían mucha confianza y algo parecido a
una relación solían acudir muchos jueves a buscar intercambios de pareja y así
conocer a otras personas.
Yo le conté que llevábamos poco tiempo viviendo en la
ciudad, nos habíamos mudado para poder vivir juntos. También le explique que
Sergio y yo manteníamos una relación abierta, yo era su nena y el mi macho. La
conversación se fue poniendo caliente poco a poco y Sofía me confesó que Marcos
me quería follar, me dijo que era un poco salidorro y yo le explique cómo era
mi Sergio. También hablamos de sus pollas, Sofía decía que su chico la tenia
normalita y le explique con detalle la herramienta que tenía mi macho, nos
miramos a los ojos y juntas empezamos a reírnos.
Marcos: ¿Qué pasa chicas, de que os reis?
Sofía: Nada cariño, estábamos hablando de pollas
Marcos: Ves Sergio si es que son unas putas jajja
Sergio: Ya ye digo tío, sobre todo la Patri.
Los cuatros nos juntamos y seguimos tomando copas.
Finalmente yo me puse a hablar con Marcos. Me conto que desde el primer momento
que me vio entrar le guste, que quería probar ese culazo nuevo en el club. También
me conto que Sergio le había contado todo sobre mi, que le gustaba y que el
sabia tratar a las nenas como yo, sobre todo en la cama y que por eso Sofía
siempre quería repetir con él.
Sergio y Sofía se levantaron de la mesa y se fueron a una
sala privada, Sofía le dijo a su chico que iban a la 12. Vi como ella marchaba
delante mientras que Sergio iba detrás mirando y tocando el culo de su nueva
amiga.
Marcos: Bueno Patricia, parece que tu chico va a follar. ¿Tú
no te animas?
Patricia: Veras estoy un poco cortada, pero con otra copa se
podría solucionar.
Marcos: Ya me aviso Sergio que al principio eres un poco tímida,
no tienes por qué cortarte con un macho follador como yo.
Al rato nos levantamos y nos fuimos a la sala 12, por el
camino Marcos me cogió la mano y se la llevo al paquete, estaba totalmente
empalmado. “Ves Patricia como se me pone al pensar que por fin voy a probar ese
culito”. Mientras caminábamos por el pasillo de la zona privada, Marcos se saco
la polla y me la enseño, la tenía completamente empalmada. Su tamaño sería de
unos 16 cm y algo gordita, ver ese miembro empalmado en mitad del pasillo me
puso como una moto. Para rematar la faena al entrar a la sala 12 vi a Sofía de
rodillas en lencería y tacones, comiéndose la polla de Sergio.
Sofía me miro con cara de vicio, en ella notaba su felicidad
al poder comerse una polla como la de mi macho. Cuando me quise dar cuenta ya tenía
a Marcos completamente desnudo a mi lado, señalando hacia su entrepierna e
indicando que era la hora de arrodillarse. Al cabo de un rato Sofía y yo ya
estábamos tocando espalda con espalda mientras nos comíamos los miembros del
macho de la otra. Así estuvimos un rato, luego cada una se fue a un sofá para
seguir la fiesta en solitario.
Sofía estaba muy cachonda, se sentó encima de Sergio y
empezó a cabalgar como una loca, sin duda estaba disfrutando del pollon de mi
chico y así el hoy echaba un buen polvo. Yo por lo contrario fui más servicial,
incline mis brazos en los laterales del sofá y puse mi culito en pompa, pronto
note como mi agujero se llenaba y me empezaban a dar muy duro. A los 5 minutos
Sergio llevaba el ritmo de la follada y le dijo a Sofía que se pusiera frente a
la pared allí mi macho la empotro y la empezó a dar duro. Mientras yo seguía en
pompa siendo penetrada por Marcos que cada vez me follaba más duro, yo no podía
gritar, gozar, gemir la verdad es que ese chico era de los que sabia follar.
Sergio y Sofía ya habían terminado de follar, mi macho le había
dado leche en la boca a la Sofí y ahora nos miraban lascivamente. Mientras
tanto yo seguía en la misma posición en el sofá aunque Marcos me había cogido
una pierna y me la había subido al sofá, así entraba mejor y el tenia donde
agarrase. Al poco tiempo Marcos me la saco, me cogió de los hombros me dio la
vuelta y me empujaba para abajo para que me pusiera de rodillas. Ya en el suelo
veía como se pajeaba su polla que apuntaba hacia mí, de pronto empezaron a
salir chorros de semen. En total fueron unos 5 o 6 que cayeron por mi cara,
boca, pelo y parte de mi ropa.
Tras un buen rato de sexo volvimos a la barra para tomar la
última copa y comentar la jugada, ellos nos comentaron que frecuentaban muchos
club y que siempre iban en busca de nuevas parejas para simular una especie de
primera cita que era el fetiche que compartían y les encantaba hacerlos juntos.
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